Dicen que en La Gomera no hay nadie que no tenga en su familia a algún miembro de una orquestista de verbena, aquí os dejo con una muestra que me ha parecido simpática. A mi no me disgusta el rollito verbenero con unos guiscassos y en plan de echarse unas risas ¡épaleee!...
las sandalias de la señora no tienen desperdicio ¿no tenía frio en los pieses?
y esto va por ti ;)
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